La sensación al bajarme del coche y asomarme fue indescriptible. Era como estar de alguna forma por el cañón del Colorado (en algunas de sus zonas). En ese momento volví a darme cuenta la gran suerte que tengo de vivir tan cerca de tantas maravillas.
Tenemos tantos rincones en Andalucía, tan variopintos… Aprendamos a valorar todo lo que tenemos por aquí para visitar.